Casarse con un residente permanente en Estados Unidos (también conocido como titular de una «Green Card») puede ser un paso importante para obtener la residencia legal en EE.UU. Si eres un ciudadano extranjero y te casas con alguien que tiene residencia permanente, puedes solicitar la residencia a través de este vínculo.
¿Qué es un residente permanente en Estados Unidos?
Un residente permanente en Estados Unidos es una persona que tiene una “Green Card” lo que le otorga derecho a vivir y trabajar en el país de forma indefinida, aunque sin adquirir el estatus de ciudadano. A diferencia de otros inmigrantes que solo cuentan con visas temporales, los residentes permanentes tienen derechos legales más amplios y, si cumplen ciertos requisitos, pueden optar en el futuro a la ciudadanía estadounidense.
Beneficios migratorios al casarse con un residente permanente
Casarse con un residente permanente no solo implica un vínculo emocional y familiar, sino también ciertos beneficios migratorios que pueden resultar de gran importancia. A continuación, los principales:
- Posibilidad de solicitar una Green Card: El matrimonio con un residente permanente permite que el cónyuge solicite la residencia permanente a través del ajuste de estatus o la solicitud de visa de inmigrante. Aunque los tiempos de espera pueden variar, es un paso hacia la legalización.
- Acceso a un estatus legal en EE. UU.: Para aquellos que pueden estar en el país sin un estatus migratorio, este matrimonio podría dar acceso a una vía legal, permitiendo la solicitud de permisos de trabajo temporales durante el proceso de residencia.
- Beneficios para hijos del cónyuge: En algunos casos, los hijos del cónyuge también pueden beneficiarse del matrimonio con un residente permanente, permitiéndoles solicitar una visa derivada o futura Green Card.
Requisitos legales para casarse en Estados Unidos
Para casarse legalmente en Estados Unidos, tanto usted como su pareja deben cumplir con ciertos requisitos, que pueden variar según el estado. Algunos de los requisitos más comunes incluyen.
Edad legal para contraer matrimonio
La mayoría de los estados requieren que ambas personas tengan al menos 18 años, aunque algunos permiten el matrimonio a partir de los 16 años con consentimiento parental.
Licencia de matrimonio
En todos los estados, es obligatorio obtener una licencia de matrimonio. Esta licencia se solicita en las oficinas locales del condado y suele tener una vigencia limitada, dentro de la cual debe realizarse la ceremonia.
Ceremonia y firma de documentos
Para que el matrimonio sea válido, debe realizarse una ceremonia ante un funcionario autorizado, y ambas partes deben firmar el certificado de matrimonio en presencia de testigos.
Proceso de solicitud de residencia (Green Card) para cónyuges de residentes permanentes
El proceso para obtener una Green Card a través del matrimonio con un residente permanente tiene varias etapas, y puede ser complejo dependiendo de la situación del solicitante.
- Solicitud de visa de inmigrante (Formulario I-130): Este es el primer paso, en el cual el residente permanente presenta una petición para su cónyuge. La aprobación de esta petición puede tomar varios meses, y se requiere demostrar la validez del matrimonio.
- Espera de una visa disponible: Debido a las cuotas anuales para este tipo de visas, es posible que el cónyuge tenga que esperar hasta que haya una visa de inmigrante disponible en su categoría (generalmente F2A, para cónyuges e hijos de residentes permanentes).
- Ajuste de estatus o entrevista consular: Una vez que la visa esté disponible, el solicitante puede ajustar su estatus en EE. UU., si es elegible, o asistir a una entrevista en el consulado de su país de origen.
- Permisos de trabajo y viaje: Durante el proceso, el cónyuge puede tener acceso a permisos de trabajo y, en algunos casos, permisos para viajar fuera del país mientras su solicitud de residencia está en trámite.
Buscar asesoría de un abogado de inmigración
Debido a la complejidad de los procesos migratorios en Estados Unidos, es altamente recomendable contar con la asesoría de un abogado de inmigración para asegurar que el proceso se lleve a cabo correctamente. La asesoría profesional puede ser especialmente útil en situaciones como:
Evaluación de la elegibilidad del solicitante: Un abogado de inmigración puede revisar el historial del solicitante y determinar si existen barreras para su elegibilidad.
Asistencia en la preparación de documentos: La documentación incompleta o incorrecta puede generar demoras significativas. Contar con apoyo profesional puede ayudar a evitar estos errores.
Asesoría ante posibles complicaciones: Si surgen problemas o solicitudes adicionales de información por parte de las autoridades migratorias, un abogado puede ayudar a guiar al solicitante y responder de forma adecuada.
Conclusión
Casarse con un residente permanente en Estados Unidos puede abrir una puerta importante hacia la estabilidad migratoria y la eventual posibilidad de obtener una Green Card. Sin embargo, el proceso de solicitud y los requisitos legales requieren una comprensión detallada y el seguimiento adecuado de cada etapa.
Por ello, contar con una sólida orientación y asesoría, puede hacer la diferencia en la experiencia del solicitante, ayudando a evitar errores y demoras innecesarias.